La astrología horaria es la más adivinatoria de las técnicas astrológicas. Confieso que es muy eficaz para responder asuntos específicos importantes o preguntas que nos preocupen, por enrevesadas que parezcan. Sin embargo, no responde ni caprichos ni ocurrencias del momento.
¿Cómo funciona la astrología horaria?
Basta con levantar un horóscopo al proponer la pregunta al astrólogo. El horóscopo de una carta horaria es igual al de una carta natal, varía solo la técnica de interpretación, que por cierto es sencilla y nos muestra cómo evolucionará la cuestión.
El primer paso de la interpretación es ubicar la casa correspondiente a la pregunta. El significado de las casas es muy parecido al de una carta natal. La casa 1 (ascendente) indica la persona que hace la pregunta, y si quiere vender, comprar, firmar, emparejarse, separarse, etc. Es la persona que parte como origen de la compra/venta o de la relación.
La casa 2 indica el dinero que tiene disponible o el sueldo de la persona de la primera casa.
La casa 3 se refiere a preguntas acerca de hermanos y vecinos; contratos, escritos, correspondencia, emails, chats, mensajes, notas; autos, vehículos y viajes cortos; estudios (que no conduzcan a ninguna licencia ni sean de tipo superior), artículos y posts (no libros ni publicaciones oficiales).
Es una pregunta de la casa 4 cuando tiene que ver con terrenos y propiedades tanto de uso particular como pisos, apartamentos, chalets, casas, villas o mansiones, o bien de uso comercial como hoteles, oficinas, almacenes, tiendas, etc. Corresponden a esta casa también las preguntas sobre el padre, la familia, la vida familiar dentro de casa. Además, en una carta horaria esta casa indica cómo terminará el asunto o cómo será el final.
Es un asunto de la casa 5 si la pregunta está relacionada con algo de juego, diversión y creatividad; especulación, inversiones de riesgo o dinero obtenido por venta de casas o propiedades; aventuras de todo tipo, incluyendo amorosas o inicio de romances; hijos.
Si es un tema laboral o de trabajo, de salud o de inicio de enfermedad, de inquilinos o de animales domésticos pequeños, y enemigos declarados, se trata de un asunto de la casa 6.
Si, por el contrario, es un tema de pareja ya consolidada (matrimonio o pareja de hecho), o de socios, la casa 7 indica esa persona. Si es una venta, la casa 7 indica a quien irá a parar lo que está en venta.
La preguntas de la casa 8 giran en torno a herencias, impuestos, dinero de la pareja o de socios, dinero del que compra (el dinero del que recibe la transacción); tradicionalmente es la casa de la “muerte”, lo cual se interpreta hoy día como “cortar por lo sano”, terminar, eliminar, amputar, cortar una parte, o simplemente poner fin; es en esta casa cuando las enfermedades se tornan crónicas y graves.
Es una pregunta de la casa 9 si el tema es viajes largos, estudios universitarios (carreras, másters, doctorados, posgrados), publicaciones oficiales, libros, licencias de todo tipo, iglesias, religión, filosofía e ideologías, así como ministros religiosos.
Si es un tema de carrera profesional, empresas y negocios, socios accionistas, dirigentes y personas de poder, o acerca de la madre, es una pregunta de la casa 10.
Es un asunto de la casa 11 si la pregunta trata sobre amigos o fraternidades sin animo de lucro, sobre dinero de la empresa o del negocio.
La casa 12 es para preguntas que tengan que ver con hospitales y hospitalización, asilos, cárceles, retiros espirituales, aislarse del mundo; también pérdidas, enemigos ocultos y asuntos que conducen a un despertar espiritual, en otras palabras, una bajada de karma en forma de pérdida, engaño, robo, hospitalización, perdida de libertad, confinamiento, encarcelamiento, responsabilidad con familiares hospitalizados o en asilos, etc.
Una vez situada la casa de la pregunta, el segundo paso es localizar el planeta (o planetas) que rigen el signo de dicha casa. Ese planeta será el regente, significador o indicador de la pregunta. Aries está regido por Marte, Tauro por Venus, Géminis por Mercurio, Cáncer por la Luna, Leo por el Sol, Virgo por Mercurio, Libra por Venus, Escorpio por Marte (Plutón también). Sagitario por Júpiter, Capricornio por Saturno, Acuario por Saturno (Urano también) y Piscis por Júpiter (Neptuno también).
El tercer paso es analizar el estado del planeta indicador de la pregunta. Si está exaltado, en su domicilio o en su triplicidad es un indicador positivo; en cambio si está en detrimento, caída, combusto (conjunto al sol) o retrógrado, es un indicador negativo.
El cuarto paso es analizar la casa donde se encuentra el significador de la pregunta. Una casa angular (1, 4, 7 y 10) le da fuerza o nuevo impulso, por el contrario una casa cadente (3, 6, 9 y 12) lo debilita.
El quinto paso es ver los aspectos que recibe el significador. Saturno y Marte se consideran maléficos para la pregunta, mientras que Venus y Júpiter, benéficos. El último aspecto que ha recibido y el planeta del cual lo recibe nos indica el último acontecimiento (de dónde venimos), y el siguiente aspecto que recibirá, así como la naturaleza del planeta y su ubicación nos indica lo que ocurrirá después (a dónde vamos).
Para tener noción del tiempo y la rapidez en que se resolverá la cuestión, cuando el significador está en signo cardinal es un asunto de días, en un signo fijo meses, y en un signo mutable dependerá de terceras personas y pueden pasar incluso años. Si el signo donde está el indicador es de fuego, suele ser rápido en actuar, sin miedo y directo, no necesita pensarlo demasiado ni meditarlo; los signos de aire en cambio lo piensan, analizan, comparan, recaban información, investigan, dudan y se ponen nerviosos antes de actuar, hasta que no tienen la razón clara; los signos de agua son miedosos y necesitan apoyo, pero cuando lo tienen “arrasan”, son pura energía y de paso cambian varias cosas que tenían pendientes porque antes no se atrevían.
Según el tipo de pregunta es muy útil consultar también con el significador astrológico de la pregunta, por ejemplo, en un asunto de dinero revisar Venus, y Júpiter si es mucho dinero, o Plutón si se trata de una fortuna. Para asuntos amorosos revisar Marte y Venus, para contratos, viajes cortos y escritos mirar Mercurio, etc.
La Luna es cosignificadora de la carta horaria. Si está a principios del signo (antes del grado 4) la cuestión es todavía muy embrionaria y se está gestando. Si está al final del signo (más allá del grado 27) ya es tarde, el asunto ha dado lo que tenía que dar de sí, ya ha ocurrido casi todo lo que tenía que pasar y se tendría que haber actuado antes. Por lo demás, se aplica a la Luna la técnica de los últimos aspectos que recibe: el aspecto anterior y el siguiente aspecto nos indican de donde venimos y a dónde nos dirigimos.
La conclusión es que una vez aprendida la técnica de interpretación de la astrología horaria, es de tal utilidad que incluso nosotros los astrólogos no dejamos de usar siquiera para uso personal. En mi caso, antes de comprar coches, casas, matricularme de cursos, etc., reviso la carta horaria para ver cuál sería el resultado y si me conviene o no.
Autor: José Luís Belmonte