Cuando hacemos una lectura de tarot, uno de los puntos que es decisivo a la hora de poder realizar bien una lectura, es la elección de la tirada. Elegir la lectura adecuada es clave para poder hacer una buena interpretación. Es por esto que vamos a dedicar unas líneas al tema de las tiradas.
Podríamos clasificar las “tiradas” o lecturas de tarot en dos grandes grupos:
LAS LECTURAS GENERALES
Las lecturas generales son aquellas que utilizamos normalmente cuando empezamos una consulta. Es una consulta en la que sin que nuestr@ consultante nos diga nada, tendremos que saber ver qué es lo que “trae” la persona y las tendencias más importantes a un año vista aproximadamente.
En esta lectura, sin que el/la consultante nos diga nada, deberemos saber ver: cómo está anímica y psicológicamente, tendencias de salud general, si tiene o no trabajo y las tendencias, si tiene o no pareja y evolución, temas familiares hijos, padres; si tiene temas legales, y si hay algún otro tema que pueda ser importante. Estos temas solo los vemos por encima, como si fuesen los titulares de un periódico. Después estableceremos unas prioridades y profundizaremos en aquellos temas que creamos que puedan ser importantes.
Las lecturas generales son: tirada astrológica, la de los siete ámbitos, la lectura de las 22 cartas, la celta con tres cartas en cada posición, la lectura gitana, etc.
LAS LECTURAS CONCRETAS
Las lecturas concretas son aquellas que nos sirven para mirar un tema en concreto o para profundizar en uno de los temas que hemos podido ver en la lectura general. Y existen muchísimas lecturas concretas.
Existen lecturas “concretas generales” que nos sirven para poder ver cualquier tema como sería la lectura de la cruz celta, la lectura de la sacerdotisa, lectura de la espiga, lectura de las 13 cartas, etc.
Y lecturas “concretas específicas” que nos sirven para poder profundizar en un tema concreto de amor, o salud, o trabajo: lectura del corazón, lectura de la evolución de pareja, lectura del sexo, lectura del pleito, lectura kármica, lectura del proyecto, etc.
Existe otro tipo de clasificación. En función del tipo de interpretación y de lectura podemos clasificar las lecturas:
LECTURAS CERRADAS
Las ”lecturas cerradas” son aquellas en las que la lectura parte de una posición determinada “pasado lejano”, “recursos”, “obstáculos” , “consultante”, “evolución”, etc.
Estas lecturas cerradas son para preguntas concretas que requieren de respuestas también concretas.
Estas lecturas nos irán muy bien para aquellos días en los que estamos menos “fluid@s” o en los que notemos que nuestr@ consultante está muy cerrad@ y nos cuesta conectar. Son las lecturas que generalmente utilizamos cuando empezamos a leer el tarot.
LECTURAS ABIERTAS
Las “lecturas abiertas” son aquellas que no parten de una posición predeterminada. Los temas importantes vendrán más por los arcanos que salgan que por la posición. Son lecturas que permiten más matices, más detalles, son más intuitivas y nos dan respuestas más abiertas.
Estas lecturas nos van muy bien porque nos permiten crear más conexiones entre los arcanos. Y las podemos utilizar cuando estamos más fluidos, pues nos permiten conectar muy bien con nuestra intuición.
Son lecturas como la de los tres septenarios, lectura de las 22 cartas, etc.
Ya ves lo importante que es elegir bien la lectura, en función de la pregunta y en función de nuestra disposición. Es por esto que antes de hacer una lectura deberemos saber si vamos a realizar una lectura general o concreta. Y en función de cómo estemos nosotros deberemos elegir una lectura abierta o cerrada.
Si elegimos bien la lectura, ya tenemos una parte de la consulta “ganada”.
Espero que este artículo te haya sido útil.
Gracias por tu atención.
Autora: Mª del Mar Tort i Casals